El ensayo es atreverse, y sustentar el atrevimiento. Sin la novedad de la propuesta de pensamiento, una estructura bien armada es la evidencia del vacío. El ejercicio es fundamental, para lograr cualquier destreza y más en esta donde se aprecia la singularidad del tema y en la forma de escribir.
Al ensayo se le atribuye una característica empírica, la disertación, la reflexión, la dilucidación de la experiencia. El performance y el ensayo se encuentran en la biofísica del cuerpo y el lugar desde donde se vive la vida.
Cada uno de los participantes, elabora un ensayo relacionándolo al contexto artístico - teórico del curso.
Sobre el tema del ensayo como tal, podemos revisar varios enlaces que darán cuenta de diversos contenidos: tipologías, características, autores, enfoques ...
Para quienes hemos transitado el camino de la escena pública sabemos, como decía el maestro de teatro, "no hay mejor improvisación que la que se ha ensayado mil veces"... Así desde nuestra más inicial experiencia de acto cultural, cualquier ritual de interacción social, el ensayo es un tipo de experiencia muy apreciada para acciones complejas que implican el involucramiento de muchos factores materiales con la expresividad y comunicación humana.
Cada clase es una performance, ensayada de muchas maneras, es única y es el resultado de la contribución interactiva de sus participantes.
Normas y Políticas son un binomio indisoluble, el juego de poder de sus diferentes relaciones, condiciona la performance de cada uno de los actores.
El espíritu del situacionismo impregna el enfoque que da lugar a muchos textos audiovisuales, que se asocian por su característica disertativa - argumentativa, introspectiva, testimonial, con un tipo de documental autobiográfico, que emplea la despersonalización y el distanciamiento dentro de su narrativa, propio de los escritos científicos en el ensayo audiovisual.
Autores referenciales : Guy Debord, Jean Luc Goddar, Jonas Mekas.
NUS
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